Me preguntaron si podía saludarla dije que sí y vino a mí con su mirada hacia abajo con una amiga tomada de la mano, que una carta me entregó me dijo yo la escribí, pero ella me la dictó Alzé su rostro y le pregunté por qué lloraba y solo me besó con sus ojos cerrados mi cara tocó y me dijo: lee mi carta, por favor Queda en mi boca un gusto a tristeza porque al irse me di cuenta que ay, no podía ver Leí la carta, y en ella me cuenta como imagina que soy no pone de qué color, para ella soy su príncipe Alzé su rostro y le pregunté por qué lloraba y solo me besó con sus ojos cerrados mi cara tocó y me dijo: lee mi carta, por favor Queda en mi boca una gusto a tristeza porque al irse me di cuenta que ay, no podía ver.
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